Adiós

Jamás pense que te volvería a ver, hoy mientras hacía fila en el banco, llegaste, y estábas formado justo detrás de mí, no te había visto, hasta que me saludaste, la verdad me sorpredí mucho, no puedo decir que me dió gusto volverte a ver después hace casi 5 años que terminó lo nuestro, recuerdo que tuve que escapar de tu lado, tenía miedo de seguir ahí, me hiciste tanto daño, tantas heridas, las marcas físicas se borraron, pero las del corazón, pensé que jamás sanarían.

Hasta hoy que te volví a ver, me saludaste y al voltear a verte, por primera vez te ví sin miedo, pude ver que eras una persona más, y no aquel mounstro, cómo te guardaba en mi memoria, al saludarte dibujé una sonrisa, no vino de mi corazón, fué casual, y aprendída, ésta vez fué diferente, ahora me siento más fuerte, porque ahora se quien soy yo, y ya no soy mas, la persona que tú querías que yo fuera.

Hablámos por escasos 10 minutos, te conté que estaba muy enamorado, que había encontrado a alguién que me amaba con la misma intensidad que yo a él, alguién que me hacía feliz, y con quien me podía sentir seguro, y que por primera vez en mi vida, podía decir que sentía el verdadero amor, te decía que en 15 días viviré con él, me decías que te sorprendía y que te daba gusto verme tan feliz, que lamentábas lo que había en nuestro pasado y tódo lo malo que me habías hecho, pero que jamás lamentarías haber conocido a alguién cómo yo.

Me contaste que ahora vivías con una mujer, y que tenías una hija de 4 meses, lo llamaste un error de borrachera, que no tenías trabajo y que tu vida ahora era muy difícil, miéntras me contábas, en tus ojos se veía tristeza, esa mirada que por mucho tiempo alimentó mi miedo, por primera vez me hizo sentir pena por ti, te ves aún más delgado, dices que a causa de tu enfermedad sigues perdiendo peso, que no cabía duda, tódo lo malo se paga.

Fué mi turno de pasar a la caja, y lo último que pude escuchar de tus labios fué, 'espero que algún día me perdones'.

Y así, salí del banco, no pude voltear a verte otra vez, sólo pude sentir alivio en mi corazón, en ese momento me liberé de tu fantasma, y me sentí en Paz, y así con cada paso que daba, dejaba los recuerdos, las angustias, los miedos y los rencores que por años estuvieron en mi corazón.

Gracias.